La cordura.. el mal de los ciegos

El paro general que ha arrancado hoy en Rumanía no se sabe cuánto durará. Decenas de miles de funcionarios, incluidos de prisiones, secundan las protestas contra el recorte de salarios públicos anunciado por el Gobierno.

Hospitales, escuelas, institutos y comisarías de polcíca, además de todos los servicios de la administración pública se han visto gravemente afectados.

“El Gobierno tiene que retirar estos recortes criminales y aplicar medidas económicas que sean coherentes y funcionen a medio y largo plazo. O acabaremos muertos de hambre” dice un trabajador en huelga.

“Uno de esos ministros tendría que darnos su sueldo y que tuviera él uno como los nuestros. Ya veríamos como se las arreglaba para salir adelante” comenta una mujer.

Rumanía aplicará a partir de mañana los anunciados recortes del 25 por ciento en el sueldo de los funcionarios y de un 15 por ciento de rebaja de las pensiones. Dolorosas medidas con las que el Ejecutivo rumano responde a las exigencias del FMI para reducir su desbocado déficit público si quiere seguir recibiendo el multimillonario crédito pactado el año pasado con el organismo internacional.

También los jubilados han salido a las calles de Bucarest.

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